viernes, 26 de marzo de 2010

Recordandote Siempre




Hace cuatro años que Rocío nos abandono para siempre. Fue una tarde en que simplemente rogó la bendición de Dios por ultima vez. Luego cerro los ojos, lanzo un suspiro y partió como llevada por un sueño... O quizás despertó ante la verdadera realidad que todos anhelamos conocer alguna vez.

Si nuestras vidas son el fluir de un río, en alguna parte debe encontrarse las aguas de donde procede ese fluir y donde todo perdura para siempre. En alguna parte la belleza es eterna, como lo es la bondad y la alegría. Allí no hay dudas ni temores, y se puede vivir siempre en paz en compañía de aquellos que mas amamos.

Algo de ese río había en ella. Nos trajo una magia y una fantasía que no podemos olvidar. Algo en ella era eterno... Siempre fue algo mas que una persona. Era la imagen de algo que guardábamos en nuestras almas. Ni fue una película. Si no la emoción que sentíamos al ver a una chiquilla haciendo las cosas que no nos atreviamos a hacer. Ni tampoco fue una canción. Fue la maravilla que se siente al escuchar una melodía sublime.

Fue como un lienzo en el que cada uno dibujo sus mas caros anhelos. Fue muchas cosas, pero por encima de todo, fue ella misma. Tanto como hija, como esposa y madre.

Que viva siempre en nuestros recuerdos María de los Angeles de las Heras Ortiz. Que viva por siempre Rocío Durcal.

Gracias Ricardo por estas bellas palabras.